Nuestro colegio se define como un centro católico, perteneciente a la Fundación Educere que basa su estilo educativo en una enseñanza de calidad, cuyo objetivo se fundamenta en la formación integral de los alumnos de acuerdo con una concepción cristiana, preparándolos para participar activamente en la transformación y mejora de la sociedad de forma ACTIVA, AUTÓNOMA Y CRÍTICA con un profesorado implicado en la tarea educativa y en colaboración con las familias y las necesidades del entorno. 

Nuestro carácter propio se articula en cinco elementos: misión, visión, valores, rasgos de identidad y cultura organizativa.

Nuestra razón de ser se ve reflejada en unos objetivos que priorizan:

La atención a la diversidad, ofreciendo una enseñanza adecuada a cada alumno según sus necesidades educativas y su ritmo de aprendizaje, preocupándonos por los más débiles y necesitados, tanto intelectual como económicamente.

Enseñar a los alumnos a convertirse en personas competentes, dotándolas de recursos y habilidades emocionales y sociales que les permitan elegir un itinerario personal lo más armónico posible para que sean adaptables a un futuro incierto.

Crear un equipo docente capaz de desarrollar las competencias intelectuales, vitales y creativas de nuestro alumnado, empleando una metodología abierta, flexible e innovadora que conduzca el desarrollo de capacidades, hábitos de trabajo y destrezas intelectuales situando al alumno en el centro del aprendizaje.

Dar respuesta a una acción educativa en valores humanos y cristianos, educando para la libertad, la justicia, la solidaridad y la igualdad avanzando en el compromiso social de la Comunidad Educativa, atendiendo al entorno que nos rodea.

Nuestra visión de futuro está basada en unos principios que aportan una visión crítica y optimista de un mundo en constante renovación.

Pretendemos ser un colegio de referencia, desarrollando modelos pedagógicos y pastorales innovadores y competentes que buscan  la formación integral de nuestros alumnos, profesores y familias.

Nuestra vocación por “educar” está asentada en los siguientes valores:

La calidad y la innovación en la experiencia educativa de una escuela abierta e inclusiva para todos orientada al servicio de las personas según nuestro proyecto educativo.

La solidaridad y el espíritu crítico para la construcción de un mundo mejor, más justo y más humano, impulsado desde los valores del Evangelio, el respeto de los derechos humanos, la aceptación de la diversidad y la conciencia ecológica.